El año pasado se registraron 5.736.018 pernoctaciones en los campings de Andalucía, pulverizando el récord del año 2019. Es más: en todos los meses del año se han batido los respectivos récords. Agosto estableció el récord absoluto con 1.223.158 pernoctaciones.
Otro dato muy positivo es que los extranjeros definitivamente han vuelto, con un total de 2.066.005 pernoctaciones, lo que supone un 36% del total. La mayoría de estas pernoctaciones (el 60%) se han registrado de octubre a marzo. Los clientes españoles registraron 3.670.013 pernoctaciones y prefieren claramente los meses de abril a septiembre con el 85% de ese total.
El récord de pernoctaciones es un dato muy positivo, que indica que el camping está de moda y que tiene un buen futuro, pero no todo son buenas noticias. Los beneficios de los campings no han crecido proporcionalmente al número de clientes, sobre todo por los enormes aumentos en los suministros energéticos y el alza de los precios en general. Además, en fechas de temporada alta faltan plazas de camping, por lo que no se puede dar respuesta a la creciente demanda. Esto se agrava por el hecho de que con las múltiples normativas hoy día es muy difícil abrir un camping nuevo o ampliar uno existente.